El Arroyo Salado de Morón es esencial para la agricultura local, no solo como fuente directa de agua para riego, sino también por su papel en la recarga de acuíferos, la fertilización del suelo, la gestión de recursos hídricos, la mitigación de inundaciones y el soporte a la biodiversidad agrícola. Su manejo sostenible es clave para mantener la productividad agrícola y la salud del ecosistema en la región.
El embalse interrumpe el recorrido del Arroyo Salado de Morón y regula su caudal hasta la conexión con el Canal del Bajo Guadalquivir . Por otro lado, existe una tubería de retorno(bombeo) desde las estación del Canal del Bajo Guadalquivir hacia el embalse que ha entrado en funcionamiento en 2024.